Imagen - Vasija de Cacao - K6706 © Justin Kerr FAMSI © 2005:
Jeffrey P. Blomster
 

Análisis Diacrónicos y Sincrónicos de la Obtención de Obsidiana en la Mixteca Alta, Oaxaca

Figura 1. Sitios arqueológicos importantes y fuentes de obsidiana en la Mesoamérica del período Formativo. Haga clic para agrandar.
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Antecedentes: La Mixteca Alta y Etlatongo

La Mixteca Alta se encuentra en las tierras altas del sur de Oaxaca, México (véase Figura 1, arriba). Ubicado a 2,000 metros sobre el nivel del mar, el Valle de Nochixtlán es el valle más extenso de esta región montañosa. La Mixteca Alta funcionó como el crisol para el desarrollo de la rica y variada cultura mixteca, mejor conocida por el sistema de ciudades-estado competitivas, que en la época de la conquista era conocido como cacicazgos. Los primeros desarrollos de la cultura mixteca – particularmente durante el período Formativo – siguen sin ser debidamente entendidos. Los eruditos a menudo interpretan esta carencia de conocimientos como un signo de que la Mixteca Alta permaneció al margen de muchos de los desarrollos culturales que tuvieron lugar en toda Mesoamérica. En verdad, los expertos a menudo contrastan el Valle de Oaxaca y la Mixteca Alta, refiriéndose a esta última como "periférica" frente a los más amplios desarrollos panmesoamericanos (Marcus 1989).

A fin de examinar la antigua complejidad social y las interacciones interregionales en el Valle de Nochixtlán, en 1992 llevé a cabo un trabajo de campo en el sitio de Etlatongo, ubicado al norte de la confluencia de dos ríos, unos 10 km al sur de Yucuita. Conocido anteriormente sólo por algunas unidades de prueba (Zárate Morán 1987), llevé a cabo en Etlatongo una prospección, un mapeo, y excavaciones mucho más intensivas. He planteado que los resultados de la excavación indican que el papel de los mixtecas en la prehistoria del Formativo debe ser cuidadosamente revisado (Blomster 1998, 2004). El análisis de la obsidiana proporciona una línea de evidencias sobre las antiguas interacciones de Etlatongo.

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