Imagen - Vasija de Cacao - K6706 © Justin Kerr FAMSI © 2005:
Blanca E. Maldonado
 

Metalurgia Tarasca del Cobre en el Sitio de Itziparátzico, Michoacán, México

Antecedentes y Objetivos del Proyecto

El sitio arqueológico de Itiparátzico está ubicado entre las comunidades de Santa Clara del Cobre y Opopeo, unos 10 km al sur de la cuenca de Pátzcuaro, en el estado de Michoacán (Figura 2). Si bien las anteriores investigaciones arqueológicas en la región habían estado centradas en las cercanías del Lago Pátzcuaro, especialmente en la capital tarasca de Tzintzuntzan, es bien sabido entre los artesanos del cobre de mayor edad de Santa Clara que en esta zona hay muchos montículos o mogotes enterrados. Presumiblemente, Itziparátzico, al igual que varias otras comunidades de aldeas tarascas en la cuenca de Pátzcuaro, se especializó en la producción metalúrgica artesanal durante le período Posclásico Tardío (Horcasitas de Barros 1981; Pellicer 1996).

Figura 2. Mapa en el que se observa Santa Clara y sus alrededores (Maldonado 2002). Haga clic para agrandar.
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De acuerdo con las fuente coloniales (por ejemplo Quiroga 1533, en Warren 1968), las poblaciones indígenas de esta región eran habilidosas e inteligentes en lo que al trabajo del cobre se refiere. Itziparátzico y varias otras comunidades de las aldeas tarascas de las cercanías, son mencionadas en fuentes coloniales como comunidades especializadas en la producción metalúrgica artesanal (por ejemplo Horcasitas de Barros 1981; Pellicer 1996). Los españoles, ansiosos por explotar la riqueza mineral del área, fundaron la villa de Santa Clara De Los Cobres (actualmente Santa Clara del Cobre) para fomentar el procesamiento del mineral metalífero. En 1540 se construyó una gran forja para fundir mineral de cobre, el cual entre paréntesis no se encuentra localmente, sino que debe ser importado de las minas de cobre de los alrededores de La Huacana, unos 80 a 100 km al sudoeste, en la Tierra Caliente (véase Figura 3). Quiroga (1533, en Warren, 1968) señala que como la fundición del mineral insumía una cantidad de carbón tres veces superior a la del mineral mismo, probablemente resultaba más económico transportar éste último desde las minas hasta las fuentes de carbón, en lugar de realizar el procedimiento inverso.

Figura 3. Mapa regional mostrando a Santa Clara, Tzintzuntzan y La Huacana. Dibujado por Roskamp, 2004, modificado por Maldonado, 2004. Haga clic para agrandar.
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El recorrido preliminar de superficie en Itziparátzico durante el verano de 2002 confirmó la presencia de montículos prehispánicos, terrazas domésticas, y evidencia de metalistería en el sitio (Figura 1). La evidencia del trabajo de metales consistía fundamentalmente de escoria (localmente conocida como querenda), que fue hallada en distintas concentraciones a través del sitio. Los habitantes locales también han hecho descripciones de objetos de cobre forjado y martillado, tales como hachas, máscaras, y pinzas, recuperados en los campos de cultivo que hoy en día cubren el sitio. Previamente, Efrain Cárdenas (1986) había reportado la existencia de tres sitios arqueológicos en Itziparátzico, a los que le puso tres nombres distintos a saber, Potrero La Cornejalera, Puente del Rebocero, y Opopeo.

El diseño de investigación del proyecto Santa Clara 2004 consistió en un enfoque de métodos múltiples para identificar y estudiar los elementos o agrupamientos de elementos asociados con las diferentes etapas de la metalurgia. El objetivo era establecer las bases para comparar las evidencias arqueológicas de una producción metalúrgica con descripciones de la metalurgia prehispánica halladas en fuentes etnohistóricas, incluyendo tanto la tecnología como la organización de la producción. Estos resultados también habrían de darnos la oportunidad de comparar la producción prehispánica de metales, frente a aquella de la época del Contacto. La primera etapa de la investigación de campo produjo un mapa abarcativo de Itziparátzico, en cuya superficie se localizó toda la evidencia del trabajo metalúrgico artesanal. Las áreas de producción fueron identificadas mayormente a partir de las concentraciones de escoria. Los datos rescatados de la excavación están siendo usados para determinar: (a) las actividades de producción que tenían lugar en dicha localización (fundido, vaciado de artefactos, modelado por percusión, terminaciones, etc.); (b) la tecnología empleada en la producción metalúrgica; (c) el contexto de la producción (doméstico, no doméstico, etc.); (d) las dimensiones y el trazado del área de producción; y (e) la cronología relativa de la unidad.

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